Date: septiembre 9, 2018
Una organización de la tenencia forestal insegura, disputada e injusta socava la protección de los bosques y la inversión en ellos, atiza el conflicto y pone en peligro los derechos, los medios de subsistencia y las posibilidades de desarrollo de los pueblos indígenas, las comunidades locales y las mujeres rurales. Teniendo en cuenta las evidencias procedentes de un estudio global en 58 países con casi el 92 % de los bosques de todo el mundo que muestra que más de dos tercios de los bosques siguen estando bajo control gubernamental—y las comunidades indígenas y locales disputan una parte significativa de dichos bosques, de los que tradicionalmente han dependido y han sido propietarios y administradores—es aun más crucial que los gobiernos apoyen y promuevan los derechos de tenencia forestal de las comunidades.
En los últimos 15 años, el área forestal legalmente reconocida para los pueblos indígenas y las comunidades locales en 41 países con datos continuados (en estos países se encuentra el 85 % de los bosques de todo el mundo) ha aumentado de 374 millones de hectáreas (Mha) en 2002 (10,9 %) hasta al menos 521 Mha (15,3 %) en 2017. Más del 98 % de esos logros tuvieron lugar en 33 países de ingresos medios y bajos (PIMB) de África, Asia y América Latina.
https://doi.org/10.53892/OTLP1097