En 2014, el primer ministro de la República Democrática del Congo (RDC), Augustin Matata Ponyo, firmó uno de los decretos finales del Código forestal de 2002. Tras más de diez años de promoción y revisión, el Decreto n.° 14/018 del 2 de agosto de 2014 sobre las modalidades de atribución de las concesiones forestales a las comunidades locales supuso un gran logro en el reconocimiento de los derechos de propiedad consuetudinaria en la RDC. Las comunidades obtuvieron el reconocimiento de los derechos de propiedad consuetudinaria que tenían sobre un total de 50 000 hectáreas de concesiones forestales. Este decreto llegó a considerarse uno de los mayores éxitos para el sector forestal de la RDC y, debido a las lagunas que presenta la legislación actual del país en materia de tierras, hoy en día sigue siendo el único mecanismo que tienen las comunidades locales y los pueblos indígenas para garantizar la tenencia forestal comunitaria.

No obstante, desgraciadamente este positivo panorama ha cambiado desde la circulación de una carta del ministro de medio ambiente y desarrollo sostenible del país. En su carta n.°1687/CAB/MIN/EDD/28/BLN/15, con fecha del 13 de abril de 2014, el Excelentísimo Ministro Liyota Ndjoli debate el proyecto piloto de silvicultura comunitaria de la RDC con el coordinador del Fondo Forestal de la Cuenca del Congo del Banco Africano de Desarrollo y escribe: «por motivos legales, ambientales y económicos, la silvicultura comunitaria debería estructurarse en torno a entidades territoriales descentralizadas, o colectividades, en lugar de en torno a comunidades, las cuales se definen por su pertenencia a un clan o una familia».

Este cambio político pone en peligro el futuro de la silvicultura comunitaria al otorgar la gestión de los bosques a las autoridades locales, cuyos intereses podrían recaer en los beneficios asociados con los recursos forestales en lugar de en la protección de dichos recursos y de las comunidades locales que dependen de ellos. Esta drástica reinterpretación de la silvicultura comunitaria indica una reducción de los derechos de las comunidades locales y los pueblos indígenas de la RDC.

Durante un taller nacional sobre silvicultura comunitaria celebrado en junio de 2015, diversas organizaciones de la sociedad civil de la RDC hicieron una declaración en la que expresaban su respuesta colectiva al ministro de medio ambiente y desarrollo sostenible. En la declaración se resumen las principales críticas a la visión que tiene el ministro para la silvicultura comunitaria, ya que se afirma que el cambio político carece de base legal; infringe tanto la Constitución de 2006 como el Código forestal de 2002; contradice la definición legal de las concesiones forestales a las comunidades locales y la visión del Gobierno para el sector forestal; y hace peligrar la financiación de los donantes destinada a la silvicultura comunitaria de la RDC. Con más de 50 signatarios, incluidos representantes de la plataforma nacional de la sociedad civil para la tenencia (CACO), esta contundente respuesta de la sociedad civil saca a la luz la amenaza implícita en la reducción de los derechos que tienen las comunidades locales y los pueblos indígenas de los bosques de la RDC.