Una queja de Forest Peoples' Programme (FPP) apoyó a comunidades locales en los condados de Bomi y Grand Cape, Liberia y fue exitosa en causar que una importante empresa de palma de aceite cesara algunas de sus operaciones. FPP planteó una demanda ante la Mesa redonda sobre el aceite de palma sostenible (RSPO) relacionada a la asignación de las tierras consuetudinarias de las comunidades locales a la compañía malaya, Sime Darby, por el establecimiento de plantaciones de palma de aceite de 10,000 ha y 15,000 ha sin su consentimiento previo, libre e informado. Esto viola los Principios y Criterios de la RSPO y del Procedimiento para el desarrollo de Nuevas Plantaciones. La demanda fue exitosa y forzó a la Sime Darby a suspender sus operaciones sobre dichas tierras hasta la realización de debates bilaterales entre las partes afectadas. A estos extensos debates bilaterales participaron representantes de las comunidades afectadas y de comunidades de otras zonas en las que se planea la inversión en cultivos de palma, representantes de la ONU, un pequeño grupo elegido por las comunidades como su principales negociadores y altos funcionarios cargos de la Sime Darby de Malasia y Liberia.