Del 19 al 22 de agosto de 2024, los líderes de las agencias forestales públicas de la red MegaFlorestais de algunos de los países más forestados del mundo se reunieron en el estado de Pará, en el centro-norte de Brasil. Se reunieron para informarse sobre los programas de gestión forestal en curso, los avances y los retos de elevar el papel de la conservación liderada por la comunidad, prevenir la pérdida de bosques y promover la restauración y reforestación en todo el mundo.
Este documento comparte ideas emergentes, principios y buenas prácticas para socializar el concepto de vigilancia comunitaria entre las empresas y los inversores en sectores basados en la tierra, así como esbozar los pasos que pueden tomar para comprometerse de manera significativa con los Pueblos Indígenas, las comunidades locales y los Pueblos Afrodescendientes para vigilar y responder a los posibles impactos ambientales y de derechos humanos de sus operaciones, cadenas de suministro o inversiones.
Esta investigación nos recuerda oportunamente la importancia mundial de las tierras y territorios comunitarios; su importancia para la protección, la restauración y el uso sostenible de los bosques tropicales en todo el mundo; así como las graves brechas presentes en la arquitectura internacional del desarrollo que hasta ahora han socavado el progreso hacia el reconocimiento legal de dichas tierras y territorios.
Este informe analiza los desarrollos legislativos durante el COVID-19 en la India, Indonesia y Filipinas que han socavado las interacciones sostenibles entre humanos y el medio ambiente y el pleno disfrute de los derechos sobre territorios consuetudinarios por parte de los PI y de las CL. Aunque la India, Indonesia y Filipinas no han ratificado todavía el Convenio Núm. 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales, publicado en 1989 por la OIT, ya ratificaron la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI). Asimismo, cada uno de esos países ha promovido reformas de tenencia de tierras y bosques a nivel nacional, aunque su implementación ha sido débil.
Un reciente informe se cuantifica el carbono almacenado sobre el suelo en los bosques tropicales que están bajo la propiedad legal o posesión tradicional de los pueblos indígenas y las comunidades locales de 37 países de las zonas tropicales de América, África y Asia. Con este informe se inicia una colaboración a largo plazo entre el Centro de Investigaciones Woods Hole (WHRC), la Iniciativa para los Derechos y Recursos (RRI) y el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) para dar seguimiento continuo de la función que desempeñan los pueblos indígenas y las comunidades locales en la captura del carbono a escala mundial. A futuro, se pretende añadir datos de otros países, ecosistemas no forestales pertinentes y tierras bajo posesión tradicional que carecen de reconocimiento oficial. Este trabajo pretende ser la continuación de estudios pioneros de 2014 y 2015 iniciados por un grupo especializado de organizaciones científicas, de políticas públicas e indígenas.